Esta antología reúne a un colectivo y dieciséis narradores colombianos dignos de los primeros años del siglo, para que se unan al grupo de exploradores del abismo que se presenta ahora en las letras hispanoamericanas. Resta la lectura morosa para hacer el juicio de los autores incluidos con el favor de la crítica, los lectores y el mejor juez literario: el tiempo.