¡Ay, cuánto quiero este libro! Porque es mío y de nadie más. Bueno, es cierto que tú puedes leerlo y hasta comprarlo, pero se trata de mí. Sí... reconozco que hay más personajes: una niña tímida, un par de amigos imaginarios y varios monstruos de la noche; pero yo soy el protagonista, el centro de atención, el héroe. Mi autor debería estar orgulloso porque justo se le ocurrió el cuento del mejor personaje que ha existido: yo.
Un niño egocéntrico cree que lo tiene todo, pero está solo. Entonces, conoce a su vecina y se da cuenta de que es más feliz compartiendo su vida con una amiga.
Ilustraciones de Romina Carvajal