Los cuentos de Cheever son el testimonio literario de la clase media estadounidense de los años cincuenta y sesenta. Comparado con Chéjov, fue el gran cronista de ese territorio casi mitológico de las zonas residenciales, con sus fiestas de cóctel y piscina, sus despertares de periódico en la puerta, tardes con cuartetos de Benny Goodman en la radio y noches enteras anhelando una vida distinta. Cheever convirtió con maestría el espejismo de éxito y felicidad en el escenario de glorias y penas de familias que, entre la frustración, el deseo y el tedio, conforman un retrato incomparable del alma humana. Esta edición mantiene la selección del propio Cheever, merecedora tras su publicación en 1978 del Premio Pulitzer y el National Book Critics Circle Award.