Asistimos en esta novela al proceso de seducción de Cordelia, una joven pura e inocente, por parte de Juan, seductor experto en las artes del engaño y la manipulación. Nada más, y nada menos, es esta pequeña joya a caballo entre la novela y la filosofía, esencial para comprender el pensamiento de Kierkegaard. Al ahondar en la psicología del seductor, el filósofo danés desentraña el alma de lo que cuatro décadas más tarde Nietzsche llamaría «el último hombre», es decir, aquel ser despreciable que en la vida solo persigue ser feliz.
En ’Diario de un seductor’, Kierkegaard nos muestra, a través de cartas, entradas de diario y reflexiones personales, la complejidad del deseo humano y la lucha interna entre el placer y la moralidad.