El estoicismo es una escuela filosófica fundada en el siglo IV antes de nuestra era por Zenón de Citio en una Atenas floreciente de filósofos, maestros y pensadores, que exponían sus conocimientos tanto en la vía pública como en determinados recintos, e incluso en templos y en casas particulares, con adeptos, curiosos y verdaderos discípulos que continuaban sus enseñanzas, de tal manera, que el estoicismo ha llegado hasta nuestros días tras dos mil cuatrocientos años de hacerle la vida más plena y feliz a sus seguidores, desde la impagable gente común y corriente, hasta famosos, deportistas, monarcas y grandes potentados, señoras y señores. Entre sus máximos exponentes están: Marco Aurelio, Séneca y Epicteto. Sinceridad, control de las emociones, meditación diaria y acción recta y bondadosa, son los ejes primordiales del estoicismo para alcanzar la paz, la tranquilidad, una vida plena todos los días, y, por supuesto, la verdadera felicidad.