Kawaminami y Shimada creen haber descubierto toda la verdad sobre los asesinatos cometidos el año anterior en la isla de Tsunojima. Sin embargo, al visitar la tumba de Chiori Nakamura, una exmiembro del Club de Misterio fallecida en un trágico accidente y que también resultaba ser la hija del arquitecto de la Mansión Decagonal, se topan con una pista crucial que desmontará todas sus conjeturas. Pero lo más horrible es la información que Kawaminami recibe por teléfono: ¡todos los miembros del club que estaban en la isla han muerto!