Construir la competitividad interna es el gran reto de la gerencia moderna. Las empresas tendrán que prepararse para diseñar programas integrales de mercadeo interno como su principal estrategia competitiva.
Las organizaciones tienen que asumir el reto de diseñar estrategias de servicio al cliente interno, como condición para que la era del conocimiento y de la generación de capital intelectual no sea un concepto más de moda o pasajero.